¿Cómo afecta la Conductividad Eléctrica en el cultivo?
Las plantas necesitan nutrientes para desarrollarse. En el caso de no proporcionarles suficientes nutrientes, las funciones básicas de las plantas se ven afectadas, pero a la vez, si se aplica demasiada concentración de fertilizantes el buen desarrollo del cultivo también se ve afectado. En otras palabras, hay que encontrar cuál es la dosis de fertilizantes que hay que añadir para que las plantas se puedan desarrollar correctamente.
Muchas veces se añade más concentración de fertilizante de la necesaria. Generalmente, no son los nutrientes en si quien directamente afectan el buen desarrollo de las plantas, si no que es el efecto que tienen en el agua. La sal en el agua reduce su potencial hídrico haciéndola menos disponible para las plantas. Esta es por tanto quien puede afectar el buen desarrollo de la planta.
La sal del suelo proviene de los fertilizantes que se han aplicado, pero también de la propia agua de riego. Parte de estas sales son lavadas del perfil del suelo por el agua de riego en forma de lixiviado. Pero cuando el agua es evaporada de la superficie del suelo, las sales son acumuladadas en la superficie del suelo. Dada esta acumulación, si aún se añaden más sales, el suelo puede salinizarse, afectando la planta y su desarrollo. En parcelas comerciales, se puede dar que cientos de hectáreas pierdan parte de su producción a causa de una salinización del suelo.
La salinidad y la Conductividad Eléctrica
Des de hace más de 100 años, la salinidad del suelo ha sido medida mediante la conductividad eléctrica. Los primeros métodos median directamente la conductividad eléctrica en muestras de pasta saturada, pero la influencia de la pasta en las medidas llevaba confusión e interpretaciones erróneas. Richards (1954) dio un paso adelante y mejoró el método. Definió que la conductividad eléctrica había que medirla en la solución de la pasta saturada. Además, los valores de conductividad eléctrica fueron correlacionados con la respuesta de varios cultivos.
Richards (1954) definió 4 intervalos de salinidad de suelo. También añadió algunos cultivos que pueden desarrollarse correctamente en los niveles de salinidad establecidos. Más adelante, Rhoadaes y Lovejoy (1990) ampliaron esta lista. Por ejemplo, las judías son sensibles a la salinidad. Solamente pueden crecer sin comprometer su producción en suelos donde la Conductividad eléctrica sea inferior a 2 dS/m. El ajo, es un cultivo bastante tolerante a la salinidad y puede suportar valores de conductividad eléctrica de 16 dS/m.
Clase USDA | Intervalo de Conductividad (dS/m) | Sal en el suelo (gr/100 gr) | Potencial Osmótico (kPa) | Tolerancia del cultivo a la sal | Ejemplo |
A | 0 -2 | 0 – 0,13 | De 0 a -70 | Sensible | Judías |
B | 2 – 4 | 0,13 – 0,26 | De -70 a -140 | Moderadamente sensible | Maíz |
C | 4 – 8 | 0,26 – 0,51 | De -140 a -280 | Moderadamente tolerante | Trigo |
D | 8 – 16 | 0,51 – 1,02 | De -280 a -560 | Tolerante | Ajo |
En la Tabla se muestran dos columnas más. La tercera columna muestra cuanta sal es necesaria para llegar a cada umbral de salinidad. Y la cuarta columna muestra el potencial hídrico de la solución de la pasta saturada.
Entender las medidas de Conductividad Eléctrica
Entender la diferencia entre la conductividad eléctrica del agua y la del suelo puede ayudar a usar correctamente las lecturas medidas por sensores. En el siguiente vídeo se responden preguntas muy útiles como por ejemplo “¿Por qué la conductividad eléctrica del agua es 1,9 dS/m y no coincide con la conductividad eléctrica del suelo?”